Tienda estoica > Blog estoicismo

Cómo desarrollar la autodisciplina con el estoicismo

Contenido

«Si te cuesta levantarte de la cama por la mañana, dite a ti mismo: «Tengo que ir a trabajar, como ser humano. ¿De qué me voy a quejar si tengo que hacer aquello para lo que nací? ¿O es para lo que fui creado? ¿Para acurrucarte bajo las sábanas y mantenerte caliente?».

  • Marco Aurelio

Disciplina: es algo que todos deseamos, pero parece cada vez más difícil de desarrollar.

Últimamente me he dado cuenta de que cada vez hay más meses en los que se trata de crear hábitos más constructivos.

Tenemos cosas como Stoptober, Dry January y No Nut November. Todas estas iniciativas unen a las personas y fomentan la disciplina para mantenerse alejadas de diversas actividades destructivas como el alcohol, las drogas, el porno, etc.

Creo que estas iniciativas son estupendas y demuestran que tenemos un fuerte deseo de cambiar los hábitos negativos. Pero seguro que ya sabes que cambiar de hábitos es mucho más fácil decirlo que hacerlo.

¿Cuántas veces has hecho un plan, te has comprometido con un objetivo o te has prometido cambiar, sólo para dejarlo al cabo de unos días, ceder a tus impulsos y volver a tu antiguo yo?

Eso ocurre a menudo.

La disciplina no es más que tu capacidad para superar tus antojos a corto plazo, y los antojos a corto plazo son la muerte del cambio de hábitos. Así que para cambiar de hábitos, necesitamos desarrollar disciplina.

En este artículo encontrarás:

  • Por qué es tan importante la disciplina
  • Por qué cada vez es más difícil desarrollarla
  • Cómo puedes desarrollarlo

ESTOICISMO Y DISCIPLINA

Los estoicos eran partidarios del autocontrol. Promovían el autoexamen, el autocontrol, la responsabilidad personal y la objetividad.

El estoicismo nos enseña que sin disciplina estamos destinados a vagar por la vida como pasajeros. Por defecto, nos dejamos arrastrar por los caprichos del mundo que nos rodea y por nuestros deseos primarios.

Con disciplina, sin embargo, somos capaces de trazar nuestro propio rumbo. Tú eres el capitán al timón de tu barco. Desarrollas la capacidad de elegir tu dirección y utilizar lo que está bajo tu control para llegar a ella.

«Mal piloto es el que deja que las olas le arrebaten el timón de la mano, el que deja volar las velas y abandona el barco en la tempestad; pero merece alabanza, aunque naufrague, el que se apodera audazmente del timón y lo mantiene hasta que el mar se acerca a él.»

  • Séneca

Toma el timón.

¿POR QUÉ DESARROLLAR LA AUTODISCIPLINA?

Siempre que tenemos un objetivo, tanto si queremos perder peso como si queremos montar el negocio de nuestros sueños o convertirnos en un músico increíble, tenemos que trabajar.

Para hacer ese trabajo, tenemos que ser capaces de superar nuestros impulsos. Esto es disciplina; la capacidad de actuar a pesar de la tentación de no hacerlo.

Esto no significa que no sientas la necesidad de relajarte, sino que has desarrollado la capacidad de resistirte a esa sensación. Cuanto más actúes contra tus impulsos, más podrás hacerlo. La disciplina se desarrolla como un músculo.

Puesto que el éxito, la formación de hábitos y la consecución de objetivos requieren que te presentes y trabajes duro, la disciplina es una de las habilidades más importantes en la vida para triunfar, independientemente de lo que el éxito signifique para ti.

DISCIPLINA FRENTE A MOTIVACIÓN:

La motivación es un buen combustible para hacer las cosas, pero es voluble. Va y viene. Así que si sólo confías en tu motivación para hacer las cosas, es fácil volver a caer en viejos hábitos o procrastinar.

La disciplina es diferente, es constante. Cuando no hay motivación, la disciplina se impone. Nos mantiene en el camino hacia nuestro objetivo, incluso cuando nuestro cuerpo o nuestra mente preferirían acurrucarse en el sofá, comer Doritos y ver Netflix.

No me malinterpretes, soy partidaria de los días de pereza para reponer fuerzas de vez en cuando, pero creo que es importante que sea una opción y no una muleta.

Cuando confiamos en la motivación, nuestro rendimiento va y viene y corremos el riesgo de volver a caer en viejos hábitos. Si somos disciplinados, nuestro rendimiento se mantiene constante.

Como dice Jocko Willink, «disciplina es igual a libertad».

¿POR QUÉ ES CADA VEZ MÁS DIFÍCIL DISCIPLINARNOS?

La disciplina no es fácil, es cuesta arriba y no hay cima en la montaña. Creo que cada vez es más difícil cultivar la disciplina, y la respuesta sencilla a por qué es así es que la vida es cada vez más fácil.

Una vida más sencilla crea dos condiciones que dificultan el cultivo de la disciplina:

  1. tentación:

Estamos rodeados cada vez de más tentaciones y distracciones que hacen cada vez más difícil superar nuestros impulsos.

Cosas como la televisión, las redes sociales, los videojuegos, YouTube, etc. compiten por nuestra atención y muchas de ellas están diseñadas específicamente para atraernos y cautivarnos.

Este ruido creciente hace que nos resulte difícil superar nuestro deseo de no trabajar. Sin embargo, esto no es una excusa; es nuestra responsabilidad aprender a afrontarlo.

  1. Falta de resiliencia:

Una vida más fácil también nos da menos oportunidades de ejercer la disciplina. La disciplina se atrofia como un músculo si no la utilizas, y en el mundo actual es más fácil arreglárselas sin ella.

  • Amazon ofrece entrega al día siguiente.
  • Netflix nos permite ver lo que queramos, cuando queramos.
  • Facebook e Instagram nos dan pequeñas dosis de dopamina cuando las necesitamos.
  • La comida puede entregarse en 30 minutos.
  • La lista continúa….

La gratificación instantánea nos priva gradualmente de la oportunidad de practicar la disciplina. Nos volvemos impacientes, expectantes y nuestra atención decae.

Por desgracia, el mundo nos quita nuestras fuentes de resistencia, la misma resistencia que es necesaria para desarrollar la disciplina.

En realidad, no necesitamos hacer eso en absoluto para sobrevivir. Pero el cuerpo necesita comodidad, necesita gratificación y placer instantáneos. Como hemos dicho antes (y esto se repite a propósito), la disciplina es la capacidad de superar estos sentimientos.

En cuanto a la comodidad excesiva, citando al almirante Akbar, «es una trampa».

Creo que demasiada comodidad se interpone en tu camino. Tu cuerpo lo anhela y te atrae hacia él.  Una cantidad razonable de comodidad está bien, pero demasiada comodidad reducirá tu zona de confort y romperá tu disciplina. Demasiada comodidad nos ablanda, igual que un músculo que no se utiliza se debilita.

La resistencia es incómoda, pero la resistencia es el catalizador del crecimiento. Nos da una sensación de crecimiento, logro y realización. Nos muestra los límites de nuestras capacidades y nos permite superarlos.

El impacto psicológico de saber que puedes hacer algo es profundo, y sólo puedes encontrar ese límite resistiéndote.

Nadie encuentra sus límites sentándose en el sofá.

Entonces, ¿qué podemos hacer en un mundo que elimina las fuentes de resistencia? Creamos la nuestra.

Algunos ejemplos:

  • Ejercicio regular
  • Eventos (10k, 5k, carreras de barro, carreras benéficas, etc.)
  • Artes marciales (recomiendo BJJ)
  • Aprende una nueva afición
  • Construye algo (coche, casa, proyecto, etc.)
  • Levántate temprano
  • Continúa tus estudios (diploma, acreditación, doctorado, etc.)
  • Iniciar un proyecto de pasión/trabajo a tiempo parcial

¿CÓMO FOMENTAR LA DISCIPLINA?

Ya he dicho antes que la disciplina es como un gimnasio. Necesitamos resistencia para crecer, y ese crecimiento depende de la resistencia que opongamos.

Cuando somos nuevos en el gimnasio, no levantamos 300 libras enseguida. Empezamos con pesas pequeñas y ligeras.

Lo mismo ocurre con la disciplina. Empieza poco a poco, tiende la cama, haz la colada, ordena tu habitación, escribe una página, lee una página, no comas chocolate, sal a dar un paseo a la hora de comer, guarda el teléfono, no abras la pestaña de incógnito, acuéstate antes, despiértate antes, etc.

Cada vez que sentimos esa vocecita interior que nos pide que nos resistamos a una acción o que afirmemos la decisión de no hacer algo, es una oportunidad para desarrollar la resiliencia. Ésta es la resiliencia que necesitas para crecer.

Una vez que tomamos conciencia de ello, podemos notarlo.

Una vez que nos damos cuenta, podemos evitarlo.

Una vez que lo comprendemos, podemos utilizarlo como herramienta de crecimiento.

CONCLUSIÓN

El deseo siempre nos alejará de las cosas que queremos. Sin embargo, podemos desarrollar la capacidad de resistirnos más fácilmente a esta atracción. Esto es disciplina y es nuestra responsabilidad.

El filósofo estoico Marco Aurelio fue emperador de Roma y tuvo la misma lucha con la disciplina que tú y yo. Escribió: «Soy un hombre que no tiene miedo de ser un hombre». Escribió:

«Si te cuesta levantarte de la cama por la mañana, dite a ti mismo: Tengo que ir a trabajar, como hombre. ¿De qué me voy a quejar si tengo que hacer aquello para lo que nací, aquello para lo que vine al mundo? ¿O es para lo que fui creado? ¿Para acurrucarte bajo las sábanas y mantener el calor?

Pero aquí está mejor…».

¿Así que has nacido para sentirte «bien»? ¿En vez de hacer cosas y vivirlas? ¿No ves cómo las plantas, los pájaros, las hormigas, las arañas y las abejas hacen su trabajo individual y hacen que el mundo sea lo mejor posible? ¿Y no quieres hacer también tu trabajo humano? ¿Por qué no paseas y haces lo que te pide tu naturaleza?

Pero alguna vez hay que dormir…».

Estoy de acuerdo. Pero la naturaleza ha establecido un límite para ello, igual que para comer y beber. Y tú cruzaste esa línea. Ya has tenido más que suficiente. Pero no del trabajo. Ahora sigues por debajo de tu cuota. No te quieres lo suficiente. O tal vez te guste tu naturaleza y lo que te pide. Las personas que aman lo que hacen están tan agotadas por su trabajo que incluso se olvidan de lavarse o comer.

¿Tienes menos respeto por tu naturaleza que el grabador por el grabado, el bailarín por el baile, el avaro por el dinero o el advenedizo por el prestigio? Si están verdaderamente obsesionados con lo que hacen, preferirían dejar de comer y dormir antes que abandonar la práctica de sus artes».

Amor Fati – Por favor, comparte este mensaje con quien creas que pueda beneficiarse de él.

Más artículos sobre estoicismo