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10 reglas estoicas de Séneca

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Séneca el Joven, también conocido como Lucio Anneo Séneca, nació en Córdoba, España, en el año 4 a.C. Séneca tuvo la suerte de nacer en el seno de una familia rica y bien relacionada. Se educó en retórica y filosofía y creció en la bulliciosa ciudad de la antigua Roma.

En Roma, Séneca comenzó su carrera como abogado y orador y luego se dedicó a la filosofía, en particular a la filosofía estoica.

El estoicismo es una rama de la antigua filosofía griega que hace hincapié en la necesidad de controlarse a uno mismo y desarrollar un carácter resistente ante las dificultades y la adversidad.

Los estoicos enseñaban que el mundo y todo lo que hay en él se rige por la razón y que es responsabilidad de todo ciudadano aprender el funcionamiento del mundo que le rodea y vivir en armonía con él.

Para los estoicos, vivir en armonía con esta razón universal es un paso fundamental en el camino hacia una vida buena. Asimismo, una vida virtuosa era parte esencial de esa buena vida, entendiendo por virtud el desarrollo de la sabiduría, la justicia, el valor y la templanza.

La filosofía personal de Séneca reflejaba su vida personal; era un moralista y un firme defensor de la disciplina y el autocontrol. Escribió muchas obras estoicas, entre ellas ensayos, tragedias y una colección de 124 cartas que escribió a un amigo íntimo para ofrecerle sabiduría y consejos prácticos sobre cómo vivir una vida buena y moral.

Séneca murió en el año 65 d.C. El emperador Nerón, de quien Séneca era consejero, se volvió cada vez más paranoico e inestable y creyó que Séneca formaba parte de una conspiración para derrocarle. Esto condujo a la ejecución de Séneca, a quien se le dio a elegir entre ser ejecutado por otra persona o suicidarse. Séneca eligió suicidarse.

A pesar del trágico final de su vida y de su cercanía al emperador Nerón, de la que algunos le acusaron, la obra de Séneca sobre la filosofía estoica sobrevive hasta nuestros días y ha influido profundamente en muchos que la han leído. Destacan sus enseñanzas sobre la virtud, la filosofía, la templanza y la moral, que aún hoy se leen y aprecian.

10 REGLAS ESTOICAS DE SENECA:

  • «A veces, el mero hecho de estar vivo es un acto de valentía».
  • «La verdadera felicidad consiste en disfrutar del presente sin confiar ansiosamente en el futuro, en no albergar esperanzas ni temores, sino en contentarse con lo que se tiene, que es suficiente, pues a quien es así nada le falta. Las mayores bendiciones de la humanidad están dentro de nosotros y a nuestro alcance. Un hombre sabio se contenta con su riqueza, sea la que sea, sin codiciar lo que no tiene».
  • «Toda crueldad nace de la debilidad».
  • «A menudo tenemos más miedo que dolor, y sufrimos más por la imaginación que por la realidad».
  • «Pues, ¿qué nos impide decir que la vida feliz consiste en tener una mente libre, exaltada, intrépida e inquebrantable, una mente que se sitúa más allá del miedo, más allá del deseo, que considera la virtud como el único bien, la miseria como el único mal, y todo lo demás como una masa de cosas inútiles que van y vienen sin aumentar ni disminuir el bien supremo, y que ni quitan ni añaden nada a la vida feliz?
  • Un hombre que está así cimentado debe, le guste o no, ir necesariamente acompañado de una alegría constante y de un profundo gozo que brota de su interior, pues encuentra su alegría en sus propias fuerzas y no desea mayor alegría que sus alegrías interiores.»
  • «La procrastinación es el mayor despilfarro de la vida: toma cada día como viene, robándonos el presente al prometernos el futuro. El mayor obstáculo en la vida es esperar, aferrarse al mañana y perderse el hoy. Resuelves lo que está bajo el control del destino y renuncias a lo que está bajo tu control. ¿Qué estás mirando? ¿Qué buscas? Todo el futuro está en la incertidumbre: vive ahora».
  • «La riqueza es la esclava de un hombre sabio. El maestro de un tonto.
  • «El mayor obstáculo de la vida es la expectativa, que se aferra al mañana y se pierde el hoy. Arreglas lo que está bajo el control del destino y renuncias a lo que está bajo tu control. ¿Qué estás mirando? ¿Adónde vas? Todo el futuro es incierto: vive ahora».
  • «El problema no es que tengamos poco tiempo para vivir, sino que malgastamos demasiado. La vida es lo suficientemente larga, y se nos ha dado una cantidad bastante generosa para grandes logros si la invertimos toda adecuadamente. Pero si se malgasta en lujos superfluos y se gasta en ninguna actividad buena, al final nos veremos obligados, por la compulsión final de la muerte, a darnos cuenta de que ha pasado antes de darnos cuenta de que ha pasado. Es así: No tenemos una vida corta, sino que la hacemos corta, y no tenemos una mala alimentación, sino que la malgastamos…. La vida es larga si sabes aprovecharla».
  • «Las dificultades fortalecen la mente como el trabajo fortalece el cuerpo».

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